La piratería de la televisión pagada se ha convertido en un negocio que crece sin parar en el país, pese a los intentos de las grandes empresas del sector para frenarla. Estas empresas tienen que pagar como promedio $500 mil en derechos de transmisión a las cadenas internacionales dueñas de los contenidos, valor que los piratas no cancelan, y que implica un grave perjuicio para quienes prestan legalmente estos servicios.
lunes, 17 de enero de 2011
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que vergüenza
ResponderEliminarSi bien es cierto que el servicio es costoso nada justifica estos actos.
Eliminarla verdad es fácil bajen las tarifas y se acaban los piratas, en otros paises el servicio es económico y bueno, nadie piratea
ResponderEliminarSi es lo más lógico pero nadie se le ocurre esa solución.
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